La pandemia no es lo que más preocupa actualmente en Mali

A día 10 de agosto, el número oficial de muertos por COVID-19 en Mali es de tan solo 125. Aunque esta baja cifra no es en absoluto fiable, es cierto que, aparentemente, el coronavirus no está causando grandes estragos en el país. El hecho de tener una población joven podría explicarlo.

Destacamos que en los poblados de Boidié y Kanso sigue sin haber sospechas de casos de coronavirus. En el caso de Kanso, ONU Femmes donó material higiénico al poblado para ayudarles a cumplir con las recomendaciones de prevención (foto).

La realidad es que en Mali la pandemia es un tema casi olvidado. La principal preocupación en el país es la crisis sociopolítica, tan grave que muchos piensan que podría fácilmente derivar en una guerra civil. La absoluta inoperancia del gobierno y la corrupción galopante han conducido a una crisis económica enorme. La población se está alzando, liderada por el carismático ex-imam Dicko. Cada viernes hay manifestaciones, en las que ya ha habido numerosos muertos a consecuencia de los disparos de la policía. Los manifestantes piden la dimisión del gobierno y el presidente. La presencia de potencias extranjeras ha ayudado de momento a contener la grave situación.